La exfoliación química de la cara es un procedimiento de rejuvenecimiento diseñado para renovar el aspecto de la piel de la cara y/o el cuello. La exfoliación facial es un procedimiento seguro y eficaz, pero el cumplimiento del paciente y la capacidad de seguir instrucciones son primordiales para el éxito. El incumplimiento de las instrucciones de su médico puede producir complicaciones graves como herpes o infección bacteriana o cicatrización permanente.
El día de la exfoliación de la cara, debe acudir al consultorio sin nada de maquillaje. Procederemos a desengrasar el rostro antes de la exfoliación y aplicaremos la solución de exfoliación mientras está dormido. Cuando se despierte, sentirá la cara como si la hubiese quemado el sol, pero no tendrá muchas molestias. Le cubriremos la cara con vaselina y usted continuará aplicándola hasta que vuelva a ver al médico.
La mayoría de los pacientes no tienen un dolor significativo después de una exfoliación facial. Si le duele la cara, el mejor tratamiento es aplicar compresas frías en las zonas tratadas de la cara. Le recomendamos que busque un recipiente para ensaladas y que lo lave bien. Llénelo con agua y cubitos de hielo y remoje en él varios paños (o gasas) dentro del refrigerador. Aplíquese un paño frío en la cara y esto aliviará el malestar y le ayudará a bajar la hinchazón. Cuando el paño se caliente, reemplácelo con un paño nuevo de los que tiene a remojo en frío. Puede hacer esto tantas veces como desee, pero al hacerlo lavará la vaselina, así que recuerde aplicarse una buena capa sobre las zonas tratadas cuando sea necesario. Recuerde, puede aplicarse tantos paños fríos y crema curativa como desee.
Asegúrese de que tiene la receta para el Kit de acondicionamiento Obagi, peróxido de hidrógeno al 3 % y cualquier crema hidratante común. Además, necesitará de cinco a siete días de antibióticos para tomar durante la exfoliación.
Utilice un gel espumante o un limpiador suave (Neutrogena®, Dove®, Purpose®) para lavarse la cara con suavidad durante 20 a 30 segundos dos veces al día. Haga espuma con el limpiador en las manos y aplíquelo con suavidad en la cara, luego salpique agua tibia en la cara para enjuagarla. Séquese la cara dando toques suaves y limpiando con una toalla. Si le han indicado que use peróxido de hidrógeno al 3 % (lo que reduce la probabilidad de infección), utilícelo diluido (mezclado a partes iguales con agua limpia) después de lavarse la cara dos veces al día. Aplíquelo suavemente sobre la cara con bolitas de algodón o gasa. Se harán burbujas y a menudo se pondrán blancas. Si el peróxido de hidrógeno le produce irritación y pica demasiado, puede diluir la mezcla aún más con agua limpia.
Después de lavarse y secarse la cara con toquecitos, aplique las pomadas acondicionadoras con receta que según las indicaciones, tanto por la mañana como por la noche. Después de que se haya absorbido, aplique la mezcla de Action® (hidratante) y Tolereen® (hidrocortisona al 0.05 %) o una pomada hidratante y antiinflamatorio equivalentes que pueda tener (algunos prefieren pomada de hidrocortisona al 1 % o Catrix®). Aplique su pomada o hidratante con suavidad y no las frote con fuerza. Debe usar la pomada o crema hidratante con la frecuencia que sea necesaria para evitar que la piel se seque y agriete. Es mejor tener demasiada grasa que demasiado poca. No deje que la piel se seque, ya que tirará del tejido nuevo por debajo y puede causar zonas rojas e irritadas. Puede aplicar la pomada o crema hidratante cinco veces al día, si así lo desea. Esto reducirá la tirantez y le hará sentir más cómodo. No se preocupe si no desaparece toda la pomada cuando se lave la cara; no le hará daño que quede pomada. Puede presentar ocasionalmente puntos blancos debido a toda la pomada en la piel y esto es normal. No se alarme ya que desaparecerán con el tiempo. Además, tenga en cuenta que tener algo de picor y quemazón es normal en este momento.
Asegúrese de minimizar las expresiones faciales durante la exfoliación. Los movimientos faciales excesivos causarán que la piel se agriete prematuramente, de modo que no es un buen momento para ver una película de risa, visitar a su dentista o comer una hamburguesa o sándwich grande.
¡No se frote la piel ni tire de la que se desprende! Si tiene que lavarse el cabello, hágalo con la cabeza inclinada hacia atrás en la ducha o en el lavabo. No se moje la cara en la ducha, demasiada agua hará que la piel se desprenda prematuramente y le dejará con zonas enrojecidas y doloridas que pueden provocar cicatrices o necesitar tratamiento de nuevo. Si tiene trozos grandes de piel que cuelgan de la cara, puede cortarlos cuidadosamente con una tijera de nariz de punta roma. No se siente en una sauna o jacuzzi ni haga ejercicio extenuante en este momento. La sudoración hará que le pique la cara y que la piel se desprenda demasiado pronto.
No exponga el rostro a la luz solar durante la curación (durante las primeras dos semanas). Si quiere hacer algo de ejercicio, puede salir a dar un paseo por la mañana temprano o al atardecer, cuando apenas haya sol. Asegúrese también de llevar un sombrero.
Durante la exfoliación, piense en su piel vieja y oscura (que se está exfoliando) como un vendaje que protege la piel fresca de debajo. Cuanto más tiempo pueda mantener este vendaje en su lugar, mejores serán los resultados de la exfoliación.
Puede tener algo de hinchazón durante los primeros dos o tres días después de la exfoliación, especialmente si se trata de una exfoliación mediana o profunda. En casos extremos, es posible que se le hinchen los ojos hasta casi quedar cerrados durante las primeras dos mañanas. Esta es una respuesta normal y se resolverá por sí sola, pero dormir con una almohada adicional para elevar la cabeza puede ayudar a disminuir la hinchazón mientras tanto.
No se aplique bolsas de hielo ni compresas frías en la cara para disminuir la hinchazón. Su humedad puede hacer que la piel se desprenda prematuramente.
Es importante que intente dormir boca arriba para no frotar la piel contra la almohada. Esto podría hacer que una zona se desprenda prematuramente.
Después de la exfoliación, debe usar protector solar para proteger la piel de los rayos del sol. Mantener el sol alejado de la cara es muy importante e importante para curar de forma adecuada. Todos los pacientes deben evitar la luz solar directa durante 4 a 6 semanas después de la cirugía. También es muy importante evitar la luz solar o la exposición al sol durante el primer mes después de la exfoliación. De lo contrario, se puede producir hiperpigmentación y reducirse los efectos de la exfoliación. Además, la luz solar provocará un regreso más rápido de las manchas marrones. Después del décimo día, debería usar protector solar todos los días (¡algo que todo el mundo debe hacer, de todos modos!). Además, nuestro consultorio puede proporcionarle productos medicados de cuidado de la piel que protegerán la duración de su mejora facial.
Es necesario usar protector solar y gafas de sol, y un sombrero de ala ancha. También es importante proteger la piel mientras se cura de la luz solar que entra a través de las ventanas del automóvil o de la oficina. Se recomienda el uso de un protector solar de calidad con FPS de 30 como mínimo. Debe aplicarlo varias veces al día durante el período de curación. Necesita usar protector solar incluso si usa sombrero, ya que los rayos que se reflejan también pueden causar daños. Tiene una receta de protector solar en su kit de Obagi.
Puede usar maquillaje después de uno o dos días al finalizar la exfoliación (generalmente después de una semana), y su médico le aconsejará cuándo puede usarlo.
Si tiene irritación inesperada o una posible infección, llame al consultorio de inmediato. No espere hasta la próxima cita. Esto es especialmente importante si cree que puede estar desarrollando un herpes labial.
Si tiene mucha picazón, asegúrese de usar abundante pomada de hidrocortisona al 1 %. También puede probar a usar una loción de uso diario de 4 a 5 veces al día. (Refrigerar la loción hará que el efecto sea más calmante).
El rejuvenecimiento químico de la piel es un procedimiento seguro y predecible, pero depende de múltiples medicamentos para prevenir infecciones virales y bacterianas, reducir la hinchazón, controlar las molestias y ayudar a dormir. Debe administrar los medicamentos que le han recetado según las indicaciones. Es imprescindible que comprenda las pautas de las recetas y que se administre los medicamentos según lo indicado por su médico.
Llámenos si tiene alguna pregunta o inquietud al 805-648-5121.